Por: Lic. Olga Almanza Garrido, Terapeuta familiar

¿Y cómo podríamos enfrentar este problema de disciplina?, lo voy a cerrar con estos puntos calves que comentaba mi esposo:

1. “Estar la pareja de acuerdo con la disciplina y si no tienes pareja, con mayor razón, ponerte las pilas y pedir ayuda a los hijos”. No puedes hacer mil cosas, creo que los hijos son muy sensibles y podrían hacer un equipo para salir adelante. Admiro profundamente a la mujer que es padre y madre y que está en los roles de la familia. Gracias a Dios nosotros hemos permanecido juntos y también tuvimos un bache del cual nos levantamos poderosamente.
   
   
2. “Hacer un reglamento de conducta”. Como sabrán, a tus hijos que andan mal, tienes que decirles lo que deben o no deben hacer, por eso es necesario el reglamento o rol de conducta, por ejemplo: “En esta casa nadie grita”, “Todo se pide por favor” aunque diga: “Eso era en tiempos de la abuelita”.
   
   Sigue siendo igual, los que lo hemos olvidado somos nosotros y así como los maestros, que pegamos las reglas de conducta en los salones: “Nadie va a salir de este salón sin permiso”, de ahí aprendí que en un hogar también debemos tener un reglamento de conducta.
   
   
3. “Exigir que estudien”. Aunque se oye recio. Luego dicen: “¿Cómo le voy a exigir a mi hijo que estudie si no quiere?”. El estudio es también una disciplina. No les creas cuando dice: “Mamá, ya no voy a ir a la escuela porque todos los maestros me tratan mal” o “Los niños me hacen bulling” y ya no quieren ir a esa escuela. ¿Quieres que tu hijo sea un triunfador? Que estudie, no hay otra manera de salir adelante.

Dirás: “Es que no tengo los recursos”. Hay muchas escuelas públicas buenas, donde no vas a pagar nada, hay programas de apoyo a la gente de escasos recursos económicos. Tienes manos para trabajar, tus pies para  ser diligente y saques adelante a tus hijos.

Ejemplos de esfuerzo y trabajo

Ayer escuchaba el caso de una mujer que me impactó mucho, que se levantaba a las 4 de la mañana a moler su maíz y preparar la masa para hacer un atole de maíz y le pone además chocolate. Pidió apoyo al gobierno y éste le brinda su ayuda para comprar un triciclo y sale todas las mañanas a vender su atole.

Para las diez de la mañana ya está en su casa y prepara el desayuno para sus hijos los pequeños y a los que ya salieron a la escuela, les preparó su alimento desde la noche anterior, por eso digo, la mujer tiene poder, la mujer tiene muchas cualidades que como decía mi esposo, hay que explotarlas amadas y hay que sacar fuerzas de nuestra debilidad porque cuando somos débiles o nos creemos débiles entonces somos fuertes si vemos en nuestro interior y sacamos lo más fuerte de nosotros.

¿Qué tenemos entonces qué hacer con nuestros hijos?  Motivarlos, hacerlos diligentes, que trabajen en la casa o fuera de ella, asignarles tareas en casa, no los dejes acostados todo el día sin hacer nada. No hace nada en la casa porque tú no les designas tareas.

No dejes que todo el día estén acostados o en las redes sociales o en los juegos. Estás perdiendo lo más valioso de tus hijos: “Ser diligentes”, porque sabes que ese hombre o esa mujer un día formarán un hogar y como fueron formados llevarán su hogar. Qué tremendo, qué tremenda responsabilidad sobre nosotros como mujeres. Ahora yo te digo, creo profundamente en el poder de Dios y si  encomiendas tus hijos profundamente a Dios, sé que tus hijos no tomarán un camino equivocado.

Con estas cosas que acaba de comentar, me está resaltando la importancia del orden, la disciplina y exactamente qué valores debe promover una mujer en su hogar.

Domingo.- Desde luego que son muchos los valores pero lo primordial es el amor. En segundo término se debe fomentar el  respeto, la generosidad, la humildad. Estos son los principales para que la maquinaria funcione bien. La principal labor para que funcione bien el hogar es la crianza de nuestros hijos. Implementando estos valores, todo funcionará bien.

Como maestros ustedes dicen se debe motivar a los hijos a estudiar a prepararse, ¿pero por qué creen que la mujer debe estarse preparando constantemente también?

Elda.- Porque nosotros como mujeres nunca dejamos de ser maestras. Aunque no hayas ido a la Normal, aunque no hayas ido a la Universidad, tú siempre serás maestro. Y qué tremendo que tus hijos lleguen a casa y te digan: “Mamita, ¿Me ayudas con esta tarea? Y digas: “No, yo no sé nada”.