Por: Lic. Olga Almanza Garrido, Terapeuta familiar

La Organización Mundial de la Salud considera a la violencia de género como un problema grave de salud pública, y en este sentido, estamos viendo cómo la mujer puede estar afectada por cómo está percibiéndose a sí misma y cómo está enfrentando la violencia.

Podemos ver también cómo ha incrementado el índice de suicidio precisamente por sentirse ahogadas, la mujer se siente muy deprimida, se siente muy triste, sola, con mucho dolor, con mucha angustia por la situación que está viviendo y puede llegar a pensar que ya no hay nada que hacer, que es un estilo natural que debe de seguir soportando, y eso es un error.

Entre otras Instituciones que ayudan a la mujer en este aspecto, me gustaría preguntarle a la Licenciada Guadalupe Salazar ¿cómo han logrado ver esta transformación de niñas y adolescentes que han sufrido esta violencia?

 “Yo considero que cuando se les da la oportunidad, en nuestro caso de darles un hogar cubriendo las necesidades que ellos tienen, ellas pueden sentir la seguridad y la satisfacción de que hay personas que se preocupan por ellos, apoyándoles para salir adelante en la vida, para ofrecerles una educación al conocer sus capacidades.

Ellas vienen de familias disfuncionales, donde no hay un trasfondo familiar firme pero saben que a través del apoyo que les damos en la Institución ellas pueden tener otra perspectiva de la vida, pueden luchar, pueden esforzarse, pueden llegar a ser mujeres de bien y valorarse simplemente como seres humanos.

Ahora, podemos pensar que también puede ser una cuestión cultural, esa mentalidad de que la mujer siempre va a tener que sufrir violencia, pero creemos que si estas niñas se preparan pueden tener una mejor perspectiva de vida y también pueden llegar a ser personas útiles en la sociedad, es decir, educación es lo que van a rescatar de todo esto, como dicen: “cultura queda, cuando no queda nada”. Una persona que tiene cultura, ese conocimiento le va a valer aquí y en otro país, puede tener mayor criterio, valorarse y apreciarse, puede desarrollarse de mil maneras y puede desarrollar el éxito y la felicidad en la sociedad.”