Por: Ing. Gilberto Sánchez

Y el punto 4, una sociedad dormida, una sociedad tibia, que nada hace al respecto, y que a veces participa en la misma situación, cierra los ojos, a pesar de que se entera de las miles y miles de muertes que puede a ver en el año, y de las situaciones que puede haber con sus jóvenes y sus hijos. Nada hace al respecto. Deja que el alcohol siga corriendo, no pone un freno, no pone un alto a esta situación; y eso incluye a muchos padres de familia que a lo mejor, incluso, pueden no tomar alcohol, pero dejan que sus hijos tomen alcohol.

Incluso les dan el carro y hasta dinero para que se compren el alcohol, sin entender el grande riesgo al que los exponen con ese tipo de actitudes.

Vemos, pues, a una sociedad que nada hace por alertar, y que no pide y no exige que se tomen medidas radicales contra esta situación. Primero, como padres de familia, no lo hacen y, segundo, que no piden que se tomen medidas radicales para poder apoyar en esta situación. Desde luego, quiero hacer un paréntesis, es loable, y es de mucho  reconocimiento, el saber que hay organizaciones civiles que trabajan ardua y seriamente, que hablan sobre este tema.

Conocemos instituciones muy responsables que, como padres de familia, han asumido el compromiso de velar y cuidar a sus hijos, y de estar alertando a la sociedad sobre los peligros del alcoholismo, que son movidos por intereses genuinos, por proteger y guardar la vida de sus hijos.

Y, claro, se organizan, son comprometidos, andan de aquí para allá, reparten folletos, dan programas, hablan con las personas, les enseñan. Son personas responsables que han decidido cuidar a sus hijos y alertar a la sociedad del peligro y la situación que se está viviendo con el alcoholismo.

Lamentablemente, es un puñado de personas, son muy pocos comparados con la cantidad que se está necesitando dada la problemática que hay con el alcoholismo y, muchas veces, sus esfuerzos se quedan muy cortos muy pequeños porque están compitiendo, como lo estamos diciendo, con una publicidad despiadada que no tienen ninguna consideración de los jóvenes y los niños.

Es decir, que promueve sin escrúpulos el alcohol entre los jóvenes y, como estamos viendo, está destruyendo la vida de ellos, mientras más temprana sea la edad en la que el joven se enrola con  el alcohol, será un consumidor cautivo durante mayor tiempo; eso se traduce o representa mayores ganancias para aquellos que están comerciando con el alcohol.

Se están enfrentando con gobiernos que, en un momento dado, facilitan eso promoción y venta y consumo del alcohol; no solamente eso, sino realmente existen funcionarios que no entienden su labor delante de la sociedad y que, incluso, se pueden hacer de la vista gorda cuando se dan cuenta de alguien que vende alcohol a menores.

Funcionarios corruptos que no entienden la necesidad de proteger y guardar la vida de los jóvenes, evitando que entren en contacto con el alcohol a edades tempranas, porque es cierto, hay leyes que prohíben el consumo para menores; sin embargo, las estadísticas hablan de que son más los menores que consumen alcohol a edades de 14 o 15 años.

¿Cómo es posible que exista eso? si hay leyes que regulan lo contrario; es evidente que algo está fallando y, lamentablemente, nos encontramos con tristes noticias de que hay funcionarios que no aplican la ley como deben hacerlo y exponen a la muerte a sus jóvenes.

No, definitivamente ya no podemos acudir a una fiesta donde se celebren los XV años de una joven y hay alcohol en todas las mesas de esas fiestas, alegando que hay adultos, pero en ese consumo de alcohol también los jóvenes consumen. No hay nada que regule eso y, evidentemente, está destruyendo la vida de esas personas.