Por: Ing. Gilberto Sánchez

El día de hoy estaremos hablando de un tema muy importante; es un tema vital para la vida de la familia, estamos hablando acerca del “Alcoholismo: placer mortal”.

Si usted tuvo la amabilidad de acompañarnos en programas anteriores, estuvimos hablando acerca de los efectos del alcoholismo,  tanto en la vida del individuo como en la sociedad y familia. A manera de resumen, quisiera retomar, solamente, algunos datos de temas pasados sobre el alcoholismo.

Es algo que está siendo tolerado por el gobierno y aceptado por la sociedad y, de hecho, se ve como algo normal, natural hasta cierto punto. Se nos muestra en los medios de comunicación, en cualquiera de ellos, que el beber es algo esencial para tener una vida plena, una vida, una vida feliz.

Es un ingrediente que no puede faltar en las fiestas, que tampoco puede faltar en cualquier tipo de celebración.  Vamos, aun ya hasta en los XV años, en los cumpleaños, aun en los bautizos.

En cualquier tipo de celebración, el vino debe de estar presente para amenizar y dar  vida a la celebración o a la fiesta, y la gente lo empieza a ver como algo común, algo que se debe tener, que se debe llevar a la mesa a la hora de las celebraciones.

Y no solamente en las celebraciones, sino en los eventos deportivos, a la hora de reunirse para ver algún evento deportivo, alguna final de un campeonato, de lo que sea; las personas acostumbran acercar su cerveza con el propósito de ambientar y darle otro sentido, otro ambiente, a lo que es el hecho de ver el espectáculo deportivo y la gente.

Repito, lo ve como algo común, como algo que se debe de llevar, algo natural, y que todo el mundo vive parte de lo que estamos platicando.

En estos programas buscamos concientizar a las personas y hacerles ver el otro lado de lo que es el alcoholismo,  porque solamente se presenta una cara, se presenta el ambiente, la celebración, todo lo disfrute, el placer que conlleva el tener alcohol en las celebraciones, pero nunca se habla del otro lado; pero, como ya hemos venido platicando, hemos venido desarrollando el tema.  Estudiamos la semana pasada, en los programas anteriores, que hay efectos en la vida del individuo y de la sociedad. Si nosotros afectamos al individuo, este afecta directamente a su familia, y si afectamos a la familia, se verá afectada la sociedad.

Hablamos, primeramente, acerca de los efectos en el individuo; la persona se ve afectada en su salud, se ve afectada en su ambiente laboral, en su trabajo y se ve también afectada  en su familia.

Si usted recuerda, hablamos acerca de que las personas mueren por consumir alcohol, ya sea por enfermedades, por accidentes, llegan incluso a perder sus miembros; pues por el consumo de esta sustancia, conozco personas que actualmente están inválidas, realmente no pueden tener una vida tranquila, no pueden tener una vida normal, se encuentran confinados en sillas de ruedas, con inflamaciones en sus miembros, con problemas en su hígado, con problemas severos en su mente.

Personas que sufren lagunas mentales debido al consumo excesivo que tuvieron de alcohol, y es que, si usted recuerda, nosotros hablamos acerca  de que el alcohol tiene una sustancia activa que se llama etanol, que es un depresor del sistema nervioso, y es una substancia que a la hora de estar siendo ingerida, de manera incontrolada, en el cuerpo humano, empieza a generar, repito, enfermedades.

Empieza a alterar la conducta de la persona. Las personas se empiezan a volver violentas, las personas se empiezan a volver agresivas, empiezan a perder la paciencia y empiezan a afectar su entorno familiar.
Primeramente, ellos empiezan a sentirse mal, empiezan a tener enfermedades, empiezan a sufrir situaciones que los empiezan a poner mal, tanto en su desempeño laboral, como en su desempeño diario.