El nuevo rostro del crimen juvenil I Parte: Destinados a ser criminales
 

La hostilidad comienza en la infancia
 

Por: Dr. Sergio H. Canavati Ayub

La hostilidad se establece en los primeros años de vida, a la edad de 6 años. Los hábitos de agresividad e ira ya se han formado en la criatura, estamos hablando de un niño o niña de 6 años que ha sido rechazado, mal educado que ha observado malos ejemplos de parte de sus padres, de violencia familiar, alcoholismo, drogadicción, falta de provisión económica, negligencia, falta de afecto, ausencia de amor en el hogar…

¿Puede usted pensar que en un niño o niña de seis años, sus hábitos de agresividad, corajes o iras ya están formados, o sea, que a los 6 años ya estás formando a un delincuente en tu propia casa?

En cambio, los niños que disfrutan de una sensación de seguridad personal y además experimentan el apego a su papá y a su mamá, son mucho menos propensos a una vida de violencia y crimen. Por el contrario, la ciencia indica que al futuro criminal es a quien se le ha negado ese apego natural de parte del padre o de la madre.

¿Cómo se forma el delincuente? Ya usted tiene una respuesta tangible: en el hogar. Cuando el niño tiene 6 años de edad su conducta agresiva, de coraje, de ira, ya está formada.

¿Y qué va a hacer usted si ya tiene adolescentes con conductas de rebeldía, que se sienten rechazados, que están en la calle más que en el hogar, que están siendo formados por la influencia de gente que han sido rechazados igual que ellos, que utilizan drogas o que abusan del alcohol o tienen conductas violentas o pertenecen a una pandilla o empiezan a comerciar con la drogas o a formar parte de un negocio criminal? Definitivamente deberán realizarse cambios de raíz en ese hogar. Pida orientación si este es su caso, pida ayuda para tomar las mejores decisiones, estamos para servirle.

Muchos adolescentes llegan a su etapa adulta completamente destruidos moralmente hablando y forman parte de esa ola de violencia que actualmente nos oprime a todos. Una estadística de los EEUU indica que la mayoría de los francotiradores seriales que han matado niños en las escuelas de EEUU, tenían entre 20 y 30 años de edad y provenían de familias desintegradas. Aquí vemos una vez más que es la ausencia de uno de los padres un factor determinante en la criminalidad, no la pobreza. Le invito a reflexionar por unos momentos en esos jóvenes que se han convertido en asesinos seriales… algunos de ellos inclusive eran niños privilegiados económicamente, ¿cómo ve usted?

La relación entre ambos padres también tiene un poderoso efecto en los niños muy pequeños. Los niños que no reciben el cuidado y el afecto necesario en sus hogares son más propensos a pelear y a desobedecer a los padres, a llorar y a golpear a otros niños y en general son más antisociales que sus compañeros.

También se sabe que los padres que maltratan a sus hijos no suelen expresar su ira por igual a todos sus hijos. Estos padres suelen descargar su ira sobre sus hijos más difíciles. Esta hostilidad paterna y maltrato físico y emocional también son un factor clave en la formación  de un futuro delincuente.

La fábrica de delincuentes
Condiciones Legales de Uso | Derechos reservados 2012 ©