Los seres humanos somos seres de relación; nos necesitamos unos a otros. Y es precisamente en la familia donde el hombre logrará desarrollarse y realizarse plenamente. Podemos decir con toda certeza, que el hombre vive mejor en familia que de cualquier otra forma. Un cónyuge, un hijo, un hermano, un abuelo, son fuentes inagotables de amor y dicha. ¡Valorémoslas!