Los síntomas maníacos incluyen:

  • Cambios de humor severos: usualmente se siente demasiado contento o tonto, o demasiado irritable, enfadado, agitado o agresivo.
  • Altas poco realistas en la autoestima: por ejemplo, el adolescente que se siente todopoderoso o como un súper héroe con poderes especiales.
  • Aumento de energía desmedido y la habilidad de poder seguir durante días sin dormir y sin sentirse cansado.
  • Hablar excesivamente: el adolescente no deja de hablar, habla muy rápido, cambia de tema constantemente y no permite que lo interrumpan
  • Distracción: la atención del adolescente se mueve de una cosa a otra constantemente.
  • Comportamiento arriesgado repetitivo: tal como el abuso del alcohol y las drogas, el guiar temerario y descuidado o la promiscuidad sexual.

Los síntomas depresivos incluyen:

  • Irritabilidad, depresión, tristeza persistente, llanto frecuente
  • Pensamientos acerca de la muerte o el suicidio
  • Disminución en la capacidad para disfrutar de sus actividades preferidas
  • Quejas frecuentes de malestares físicos, tales como el dolor de cabeza y de estómago.
  • Nivel bajo de energía, fatiga, mala concentración y se queja de sentirse aburrido.
  • Cambio notable en los patrones de comer o de dormir, tales como comer o dormir en exceso.

Algunos de estos síntomas se parecen a otros que ocurren en el adolescente con otros problemas, tales como el abuso de drogas, la delincuencia, el Desorden de Déficit de Atención e Hiperactividad, o inclusive la Esquizofrenia.