Por: Dr. Sergio H. Canavati Ayub

Vemos también que el verdadero hombre sabrá vivir con sabiduría con su propia esposa de tal manera que sabrá la importancia de fortalecerla, animarla, guiarla para que ella pueda cumplir con su papel de mujer dentro de la casa. Es importante que veamos que hay algunos asuntos específicos que influyen en el papel del esposo. En la vida moderna el esposo o el papá enfrenta muchos más retos a cumplir con su papel que los que tradicionalmente cumplía en otras épocas pasadas, los avances en la tecnología, las demandas de tiempo, los recursos y conocimiento han hecho que el papel del esposo en la sociedad contemporánea sea mucho más difuso y definido con menor claridad, o sea el esposo se ocupa mucho en estudiar, se ocupa mucho tiempo en llegar a su trabajo, en trasladarse, las empresas les demandan demasiado a los varones y obviamente cuando llegan a casa están minados, consumidos, exhaustos, no saben ni están capacitados para ser padres.

Como si esto fuera poco la sociedad pone demandas  contradictorias sobre el hombre, por ejemplo le demanda ser un hombre sensible y compasivo capaz de ponerse en contacto con los sentimientos de sus hijos y de su esposa y al mismo tiempo le demanda que en su trabajo sea competitivo, a veces le exige jornadas largas de trabajo e incluso lo vuelven un esclavo para tratar de ir ascendiendo de posición, y esto lo hace agresivo, competitivo y muchísimos hombres hoy se sienten atrapados en este ciclo de vida vicioso donde no les permite pasar tiempos de calidad ni en cantidad con su propios hijos, podríamos decir que los hombres se sienten entre la espada y la pared.

Entonces vemos que muchos hombres nos saben amar a sus hijos porque no fueron amados por sus propios padres, ¿no es macho el que el da un beso a sus hijos? Los machos piensan que darle un besos a sus hijos está mal, que eso es de los hombres que no son hombres, o el acariciar un hijo, el besarlo, el decirle te amo, tú no sabes el poder tan grande que tienen un abrazo para tus propios hijos y crear un ambiente de cariño y demostrarles el amor afectivamente, que triste es que muchos tengan el concepto del machismo muy arraigado en nuestros países de América Latina y no sepan como besar a sus hijos, como abrazarlos como decirle a un hijo, te amo.

Las investigaciones han demostrado que los padres que son cariñosos y muestran ternura a sus hijos no crean hijos afeminados, al contrario son hijos que se convierten en hombres, hombres verdaderos que conocen su identidad masculina como hombres y tienen una identidad definida.

Más adelante veremos que muchos de los jóvenes van  al homosexualismo porque sus padres jamás les mostraron afecto ni cariño, ¿Tú crees que el machismo realmente ayuda? No, el machismo está produciendo generaciones, generaciones y generaciones de homosexuales, porque los muchachos necesitan el cariño y el afecto de los padres y cuando no lo encuentran en los padres lo tratan de buscar con el amigo a través de una relación sexual, o con un adulto a través de una relación sexual.